Lo mismo que se siente cuando te pisan, cuando te arrastras, cuando te hieren, cuando lloras sin que nadie te consuele, cuando peleas sin ningún motivo aparente. Si lo intentas, a lo mejor lo consigas, pero en el momento en el que empieces a disfrutar viéndome en el suelo, me levantaré y te diré: Yo también sé levantarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario